Visita inesperada
- Una de las pocas licencias que se ha permitido este año la profe en clase de Arte ha sido dedicar unos minutos a analizar La dama del armiño, aunque el temario de la PAU invite a obviarla. Hoy el noticioso vespertino me sorprende con el anuncio de su visita a España, algo de lo que sin duda me alegro, siempre regocija poder contemplar la belleza. No me extraña que quien ha podido conservarla a través de los avatares de la Historia afirme: Si se pierde, me muero. Ese es su precio.
- Recuerdo que al verla en clase discutimos sobre cual de las dos damas de Leonardo nos gustaba más. Mi elección está clara. Pero para gustos hay colores.