Muy cerca del famoso Despeñaperros, junto al pueblo de Aldea Quemada, existe este pequeño paraíso, especialmente a principios de primavera.
Formando parte de la parte final de Sierra Morena su roquedo combina las pizarras, cuarcitas y calizas, con preponderancia de las primeras.
Estas rocas se crearon por la deposición de arenas (cuarcitas) y arcillas (pizarras) en el fondo marino que cubría la zona en el periodo Ordovicico.
Estos estratos se elevaron posteriormente. La presión ejercida convirtió las arenas en cuarcitas (como ya vimos en la Peña de Francia) y las arcillas en pizarras.
Durante este movimiento las tensiones crearon una suave charnela (un pliegue) y varias fallas tal y como puedes ver en el dibujo.
Una de esas fallas es la que crea la cascada (cimbarra en la zona) al trascurrir el río Guarrizas, tan sólo con suficiente agua en los finales del invierno y los principios de primavera, sufriendo después un profundo estiaje.
La vegetación de la zona corresponde al clima mediterráneo continentalizado, con bosques de quejigo, encina, carrasca y pinares (muchos de ellos de repoblación).
Donde el bosque ha desaparecido aparece la maquia, especialmente ocupada por la jara de la que podéis ver su espectacular floración primaveral, y otras plantas herbáceas.
Todo esto podéis verlo en este pequeño video que (muy artesanalmente) he realizado (perdonad los fallos)