PAN Y CIRCO – Yeyo Balbás
Hace ya tiempo, desde que los votos a nadie vendemos que hemos abandonado nuestros deberes, pues el que antaño otorgaba gobierno, fasces, legiones, todo hoy se coarta a sí mismo y solo dos bienes se desean con ansia: pan y juegos circenses.
-Juvenal
Año 23 a.e.c. Roma es un hervidero de intrigas entre aquellos que se postulan como sucesores del gravemente enfermo Augusto por un lado, y los que no verían con malos ojos su caída del poder; a todo ello se suma el descontento de una plebe ociosa azotada por el hambre y la enfermedad, y a la que sólo se apacigua con entregas gratuitas de pan y costosos entretenimientos.
Y es que Roma se enfrenta a una grave crisis económica y social, con la urbe abarrotada de desempleados y pobres, repleta de libertos que están absorbiendo buena parte de los negocios, y con una clase alta (tanto senadores como caballeros) ambiciosa y corrupta que no hace nada para remediar esta situación. Una imagen que incluso parezca evocarnos tiempos más cercanos.
Aquellos que conspiran contra Augusto intentarán inflamar a los pobres de Roma para hacer saltar la chispa de la rebelión y ver así cumplidos sus planes. Marco, protagonista de la anteriormente reseñada “Pax Romana”, se verá envuelto en las intrigas, que como una tela de araña se extienden por todos los estratos sociales de Roma. Nuestro protagonista -cuyo destino quedó en el aire al finalizar “Pax romana”- ya no es un legionario de la IX Legión: ahora es un gladiador del ludus de Varrón Murena.
Podría pensarse que el tema gladiatorio está traído a cuenta del reciente éxito de la serie “Espartaco: Sangre y arena”, pero nada más lejos de la realidad, ya que en la anterior novela teníamos multitud de indicios que apuntaban en esta dirección y de nuevo se nos van desvelando uno a uno con más detalle durante esta nueva lectura.
Yeyo Balbás ha vuelto a escribir una novela sólida y absorbente, con personajes muy trabajados y llenos de aristas -tanto masculinos como femeninos-, y con suficiente dosis de intriga y acción para mantenerte en vilo durante su lectura. Como aficionado a la lectura de novelas “de romanos” puedo afirmar que la obra de Yeyo Balbás -tanto “Pax Romana” como “Pan y circo”- estará en los primeros puestos de la lista cuando recomiende novelas “de romanos”, y ocupa el primer puesto, sin duda, entre los escritores españoles de este “subgénero”. Otras novelas de temática similar que he leído en los últimos años se encuentran ya esperando el hierro (entre ellas las novelas de Ben Kane o la última de Santiago Posteguillo), derrotadas por la maestría con la pluma de Balbás.
Sin querer destripar mucho más de la historia, comentar que la novela posee varios niveles argumentales que están muy bien imbricados unos con otros:
Primero, las conspiraciones políticas y los problemas sociales en Roma; segundo, el mundo de gladiadores; tercero, la literatura y el teatro en la Roma de finales del siglo I a.e.c.; cuarto, la propia ciudad de Roma, la cual cobra vida ante nosotros en todo su esplendor y en toda su miseria.
Una novela muy bien documentada, escrita por un experto en la materia quien incluso nos incluye unos apuntes históricos para que podamos diferenciar entre ficción y realidad una vez terminada la lectura; una costumbre que no todos los escritores tienen y que yo, como lector, siempre agradezco.
Además, la novela no parece presa de la fiebre del “tocho.” Menos de 500 páginas (las cuales son unas 100 menos que “Pax romana”) se me antojan más que justas y suficientes, sin necesidad de estirar tramas y meter rellenos innecesarios. Incluso he terminado echando en falta unas páginas más en uno de los “desenlaces” de la novela para que fuese más detallado y no tan “simple”. Sin querer de nuevo destripar nada, diría que ese detalle debe ser de lo poco que no me ha gustado, y como digo, es un simple detalle sin más importancia.
Pan y circo
Autor: Yeyo Balbás
Páginas: 475
Rocaeditorial (2013)
Technorati Tags: Yeyo Balbás, pan, circo, Roma
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