8 de marzo, Día Internacional de la Mujer
A toda la comunidad educativa
Hoy es día 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Con este motivo, y contando con vuestra iniciativa y colaboración, vamos a intentar poner en valor lo que significa esta efeméride y hacer partícipe a toda la comunidad educativa de lo que este día significa.
Ya sabéis que se leerá, en cada clase, en el mismo momento del día (11 horas) un pequeño manifiesto elaborado por nuestro compañero Ángel Sánchez: «Para que no haya un solo día en falte una mujer». También nuestra compañera Mª de Guía Penco con su propuesta de actividades a trabajar desde las tutorías o en clase (Proyecto bibliotecas violetas) dentro del Plan de trabajo de Biblioteca, nos ha ayudado a conmemorar este día.
Por mi parte, estoy convencido que, si no hablamos sobre la igualdad de género y derechos entre hombres y mujeres, en la formación de nuestro alumnado, si no trabajamos la equidad de género desde las aulas, y con la colaboración de las familias, poco vamos a lograr. Entiendo la palabra feminismo, como igualdad, no la entiendo de otra manera, y creo que ese sería el camino cada día, cada momento. Nuestro objetivo debiera ser que nuestro alumnado piense de manera crítica sobre los comportamientos sexistas, que observan o fomentan en su día a día. Los centros educativos, de la mano de las familias, tenemos un papel fundamental en la formación de personas libres e iguales.
Un mes de noviembre de 2018, nuestro compañero de filosofía Carlos Díaz, escribió un manifiesto a nivel de centro dentro del Plan de Igualdad de ese curso y quiero recordar parte de sus palabras, que decían:
“…Pero que hayamos avanzado no significa que ya esté todo hecho. Al contrario, queda mucho por hacer. Y, en este sentido, creo que a nosotros, los hombres, nos corresponde realizar una tarea muy importante y necesaria, la de repensar qué significa para nosotros ser hombre, la de redefinir qué clase de hombre queremos ser, para luego traducir eso a una manera más igualitaria de relacionarnos con las mujeres y hombres que forman parte de nuestras vidas.
Lo que te propongo es algo así como una revolución, la única revolución que depende exclusivamente de cada uno de nosotros. Se trata de una revolución que no va de fuera hacia adentro, ni de arriba hacia abajo, sino de dentro hacia afuera; una revolución interior que debe llevar a cabo cada uno de nosotros, cada hombre individual, sea joven como tú o no tan joven como yo, y que empieza por cambiar el concepto mismo de lo que significa ser un hombre en una sociedad democrática como la nuestra. Los viejos modelos sobre cómo ser hombre o mujer ya no nos sirven. Necesitamos cambiarlos por otros nuevos, acordes con los nuevos tiempos.”
Feliz día 8 de marzo. Feliz Día Internacional de la Mujer.
Rafael C. Molina Valiente.
