Immanuel Kant – 3

KANT- Comentario de texto. Elementos para el comentario de texto y algunas indicaciones.

Ignacio Escañuela Romana, 15 de abril de 2019.

“Ilustración significa el abandono por parte del hombre de una minoría de dad cuyo responsable es él mismo. Esta minoría de edad significa la incapacidad para servirse de su entendimiento sin verse guiado por algún otro. Uno mismo es el culpable de dicha minoría de edad cuando su causa no reside en la falta de entendimiento, sino en la falta de resolución y valor para servirse del suyo propio sin la guía del de algún otro. Sapere aude. Ten valor para servirte de tu propio entendimiento”.

Descripción del contexto filosófico-cultural que influye en el autor del texto.

Se trata de un ensayo de carácter político de Kant, publicado en 1784. En él. Kant expone la idea general acerca del concepto y desarrollo de la Ilustración. Es necesario, pues, explicar qué sea la Ilustración históricamente. 

Se trata de un movimiento cultural y social del siglo XVIII europeo. Muy fuerte en Francia, y, también, en Alemania e Inglaterra. Pero con efectos en toda Europa. Kant se alza como el filósofo que reivindica la idea principal de este movimiento. Es quien da el lema por el que se la conoce como movimiento.

Las ideas principales son:

  • Racionalismo para solucionar los problemas y mejorar.
  • Acuerdo sobre la base de esas razones.
  • Crítica a fanatismos y creencias irracionales.
  • Ataque a valores no basados en la razón.
  • Colocar al hombre como primer problema.
  • Apoyar la idea de libre conciencia y libertad.

“Se caracteriza fundamentalmente por una confianza plena en la razón, la ciencia y la educación, para mejorar la vida humana, y una visión optimista de la vida, la naturaleza y la historia, contempladas dentro de una perspectiva de progreso de la humanidad, junto con la difusión de posturas de tolerancia ética y religiosa y de defensa de la libertad del hombre y de sus derechos como ciudadano. La importancia de la razón crítica, que es pensar con libertad, y que ha de ser como la luz de la humanidad, se deja ver en la misma raíz de las palabras con que, en los distintos idiomas, se significa este período: «Siglo de las luces», o «siglo de la razón», «illuminismo» (en Italia), «Enlightenment» (en Inglaterra), o «Aufklärung» (en Alemania). Todo cuanto se oponga, como rincón oscuro y escondido, a la iluminación de la luz de la razón -las supersticiones, las religiones reveladas y la intolerancia- es rechazado como irracional e indigno del hombre ilustrado, como «oscurantismo». Kant, con la frase «Sapere aude!» -¡atrévete a saber!- , expresa acertadamente la labor que cada ser humano ha de ser capaz de emprender y llevar a cabo por propia iniciativa, una vez alcanzada ya, por historia y por cultura, la mayoría de edad del hombre. Las ideas ilustradas constituyen el depósito conceptual sobre el que se funda la manera moderna de pensar” (http://www.filosofia.net/materiales/sofiafilia/hf/soff_mo_15.html).

“La Ilustración alemana presenta asimismo sus propias características. La crítica a la superstición, al dogmatismo y al oscurantismo toman en Alemania la forma de estudio analítico de las posibilidades y límites de la misma razón. Esta orientación, que comienza con Ch. Wolff, culmina brillantemente en la filosofía de Kant, que dedica al estudio sistemático de la razón tres Críticas. Antecedentes de la filosofía alemana en esta época son las teorías racionalistas de Leibniz, el espíritu científico de Newton, la crítica escéptica de Hume y las ideas ilustradas de los franceses. Los grandes representantes de la Ilustración alemana son Christian Wolff, en quien confluyen todas estas tendencias como en una enciclopedia del saber, y Kant, quien con su apriorismo sostiene una forma de síntesis entre empirismo y racionalismo” (http://www.filosofia.net/materiales/sofiafilia/hf/soff_mo_15.html).

En definitiva, los pensadores de la Ilustración confiaban en que el conocimiento humano podía combatir la ignorancia, la superstición y la tiranía. La racionalidad y el acuerdo llevarían a la construcción de un mundo mejor.  “Por ampliar algo más esta información, tomemos a uno de los filósofos españoles que han estudiado este movimiento. Habitualmente, se ha presentado el Siglo de las Luces como una etapa en la historia del pensamiento al margen del espíritu de sistema y del dogmatismo, dominada por esa forma menor del escepticismo que es un cierto positivismo. La crítica se muestra hoy mucho más circunspecta. La exigencia antimetafísica de los filósofos esconde en la mayoría de los casos la adopción de una metafísica de distinto signo. En consecuencia, el escepticismo ha sido un fenómeno menos extendido de lo que se dice en general” (Benítez, M., 1983, La duda como método, El Basilisco).

Luego la Ilustración plantea un escepticismo de origen, pero no lo desarrolla por tener también una serie de presupuestos teóricos previos. La creencia en los datos empíricos y la razón como método único son presupuestos.

 

Relación del tema o el autor del texto elegido con una posición filosófica de la época contemporánea.

Comparemos con Adorno y Horkheimer, filósofos de la segunda mitad del siglo XX. La gran pregunta que responder es: ¿Cómo es posible que tras la Ilustración y su fe en el hombre y la razón hayamos llegado a la experiencia del exterminio, los crímenes contra la humanidad y las cámaras de gas?.

“Hans Cornelius era el profesor de Filosofía en el seminario donde Adorno conoció a Horkheimer. Cornelius defendía firmemente la tradición iluminista; más kantiano que el propio Kant, privilegiaba la experiencia por encima de todo; sin embargo, era violentamente hostil a cualquier tipo de dogmatismo” (Roberto Rojas-Crotte. 2011, De la Teoría crítica a la dialéctica de la Ilustración).

Adorno parte de esa fe en la razón para intentar demostrar que irracional podía ser entendido racionalmente. Ataca, asimismo, desde una perspectiva crítica claramente kantiana, el irracionalismo creciente del pensamiento de los años 20 y 30. Pero Adorno encuentra en Kant: “la imposibilidad de plantear una racionalidad al inconsciente, procedió luego a demostrar que Freud brindaba conceptos básicos para lograr el «desencantamiento» del inconsciente, articuló por primera vez una crítica de la ideología que resultaba clara e inequívocamente marxista: ligaba las manifestaciones del inconsciente a la historia y explicaba las determinaciones de la vida social y económica a ellas” (op.cit.)

A partir de ahí, Adorno y Kant comienzan a diferir en sus ideas. Kant era un autor idealista, centrado en la evolución del pensamiento y el símbolo por sí mismo. Desde sus condiciones de verdad. Marx, tomado por Adorno, por el contrario, trató de entender las ideas desde un enfoque externo: desde los intereses e ideas ideológicas de personas y grupos con determinadas condiciones materiales. Las clases sociales determinaban las ideas. Para Kant, esto no era posible, era abandonar el mundo del pensamiento y tratar de encontrar orígenes heterónomos a la ética.

¿Qué plantean Horkheimer y Adorno respecto a la Ilustración?. Ambos autores creen que la Ilustración había nacido “con el signo del mito: el afán de dominación de la naturaleza por el pensamiento y la acción humanos” (op. cit.). Con la primacía del pensamiento racional sobre el pensamiento religioso o intuitivo. Mientras se desarrolla un capitalismo comercial y la burguesía, surdiría esa creencia mítica en la racionalidad y sus capacidades. Apartando todo lo que de mítico y religioso tuviese el pensamiento tradicional.

“La Ilustración… ha perseguido desde siempre el objetivo de liberar a los hombres del miedo y constituirlos en señores… Pretendía disolver los mitos y derrocar la imaginación mediante la ciencia… el intelecto que vence a la superstición debe dominar sobre la naturaleza desencantada. El saber, que es poder, no conoce límites, ni en la esclavización de las criaturas ni en la condescendencia para con los señores del mundo” (Horkheimer y Adorno, 1998: 61-62, en op. cit.).

La razón unifica y estandariza. Quita diferencia y sentidos. Arranca y anula valores. Todo se deja a la lupa de la experiencia empírica y los razonamientos. Luego se basa, sin darse cuenta, en sus propios mitos.

La Ilustración impone desde finales del siglo XVII hasta ahora dos fuerzas relacionadas y totalitarias:

* La razón instrumental. Se buscan fríamente medios para lograr los objetivos. Todo se supedita a la consecución de los fines planteados sin importar nada más. Es el reino de la técnica.

* Predominio del positivismo y neopositivismo: de los datos empíricos sobre los valores u otras consideraciones.

La razón es una especie de jaula del ser humano, que se ve constreñido personal y socialmente totalmente por ella. Esta crítica tiende, pues, a buscar valores y emociones y una nueva inteligencia emocional. Un enfoque más completo, que saque al ser humano de la alienación que la Ilustración habría introducido. Nada más contrario que Kant. Que apoya la acción de la racionalidad para lograr una sociedad mejor. Y confiaba en el intercambio racional y el acuerdo.

En definitiva, Adorno y Horkhaimer comparten con Kant el carácter crítico. Pero están en desacuerdo en la naturaleza única y monopolista de la racionalidad y de la razón instrumental en el capitalismo.

Publicado por

Ignacio Escañuela Romana

Interesado por la filosofía y la economía, que tiendo a mezclar a menudo. Es decir, seguir el lema kantiano: "Sapere Aude".

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