Una nueva guerra fría se cierne sobre el Ártico

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Fuente: El País, 5/04/2015.

La cooperación y la rivalidad han coexistido en proporciones variables en el Círculo Polar Ártico, la región que puede convertirse en la mayor fuente de petróleo y gas del planeta y en la que Rusia tiene el grueso de sus reservas de hidrocarburos (explotables y potenciales), además de 20.000 kilómetros de frontera marítima.

En 2007, el político Artur Chilingárov colocó en el lecho marino del Polo Norte una bandera rusa fabricada con titanio. Moscú ratificaba así sus reivindicaciones sobre una zona submarina reclamada en 2001, a partir de la Convención Internacional de Derecho del Mar de la ONU (1982). Tras la anexión de Crimea, que supone una violación de tratados internacionales firmados por Rusia, el gesto teatral de Chilingárov ha adquirido un nuevo significado y la desconfianza está ganando terreno a la cooperación de la que ha sido modelo el Consejo del Ártico, la organización que integra a los ocho Estados ribereños (Rusia, Canadá, Dinamarca, Noruega, Suecia, Islandia, Finlandia y EE UU), cinco de ellos miembros de la OTAN.

Desde 2008, las compañías Rosneft y Gazprom, controladas por el Estado ruso, tienen el monopolio de la explotación de hidrocarburos en el Ártico y son socios obligados para todo proyecto en la zona. El 9 de agosto de 2014, Igor Sechin, jefe de la petrolera rusa Rosneft, y Glenn Waller, director de la norteamericana ExxonMobil en Rusia, eran optimistas sobre los planes comunes que forjaron en 2011. Aquel día, en el mar de Kara, Sechin y Waller inauguraban la perforación petrolera submarina más septentrional de Rusia. Desde Sochi, en el mar Negro, el presidente Vladímir Putin dio la señal de inicio y elogió la cooperación internacional como motor del “éxito comercial”. Se trataba del “acontecimiento más importante del año para la industria del petróleo y el gas”, en palabras de Sechin, y el pozo recién perforado se bautizó con el nombre de Pobeda (victoria) por ser una “victoria común” de Rusia con un grupo de “amigos y socios” internacionales. Pobeda dio su primer crudo, pero a fines de septiembre, debido a las sanciones norteamericanas, ExxonMobil tuvo que sellar el pozo y abandonar sus proyectos en Rusia.

Rosneft se propuso seguir sola, pero las sanciones occidentales obstaculizan los proyectos rusos en el Ártico, al restringir la venta de tecnología para la perforación submarina y limitar el acceso al capital. Los políticos y analistas rusos están divididos entre quienes creen que hay que forzar la explotación del Ártico para cuando los precios del petróleo suban, y los que recomiendan concentrarse en Siberia Occidental, donde existe ya infraestructura de explotación y transporte.

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Histórico reconocimiento a las víctimas de la ‘Operación Bolero’ contra el exilio español

Parte del cementerio de Berlín donde están enterradas varias de las víctimas de la ‘Operación Bolero’. / Manuel Martorell

Autor: MANUEL MARTORELL.

Fuente: Cuarto poder, 2/04/2015.

Cuando me pidieron que diera una conferencia el 24 de marzo en el Instituto Cervantes de Berlín en homenaje a las hermanas Josefa y Elisa Úriz, no podía imaginarme que me toparía, de lleno, con la ‘Operación Bolero’, uno de los episodios más vergonzosos de la Guerra Fría desencadenado en 1950 contra el exilio republicano español de Francia. Así lo relataron testigos presenciales de aquellos hechos, tanto al final de la conferencia, como al inaugurar una exposición sobre la trayectoria vital de las dos hermanas, y en la recepción que en honor de aquellos exiliados organizó la Embajada de España en Alemania.

De acuerdo con el plan elaborado por el Gobierno del socialista René Pleven –también formaba parte del Consejo de Ministros el futuro presidente Francois Mitterrand–, cientos de cuadros comunistas, en su mayoría miembros de la Resistencia, fueron sacados de sus casas a las 5 de la madrugada del 7 de septiembre de ese año, algunos semidesnudos, maniatados, tratados como criminales y abandonados, sin comida, agua, documentación ni explicación alguna, en tierra de nadie junto a la Alemania Oriental; otros, fueron encarcelados y deportados en barco a Córcega o Argelia.

Formalmente la operación se denominaba con cierta ironía ‘Bolero-Paprika’: ‘Bolero’ para los españoles, que formaban el grueso de los deportados, y ‘Paprika’ (pimiento, pimentón) para los militantes del Este, que también los había. La justificación: el PCE y sus organizaciones se habían convertido en la ‘quinta columna’ de una hipotética invasión soviética de Europa, tal y como habían denunciado, en medio de una psicosis colectiva, periódicos tan serios como Le Monde o France-Soir.

Tras las redadas, la policía mostró como irrefutable prueba del delito los arsenales de armas, explosivos, multicopistas y radio-enlaces incautados en los registros sin que nadie explicara que todo aquel material procedía de la época de la Resistencia y estaba destinado a los ‘maquis’ que todavía seguían la guerra de guerrillas contra el régimen franquista.

Entre las pocas voces que tuvieron el valor de disentir, destacó la de Henri Groués, más conocido como Abat Pierres, sacerdote, fundador de los Traperos de Emaus y encarcelado por la Gestapo durante la II Guerra Mundial por colaborar con los resistentes.

En la lista con orden de ‘absoluta urgencia’ para su expulsión por motivos de ‘seguridad nacional’, había verdaderos héroes de la lucha contra la ocupación nazi de Francia, como el comandante Galeano, o las propias hermanas Úriz, responsables del ‘maquis español’ en la región de París junto a los también hermanos Josep y Conrad Miret, muertos a manos de los nazis.

Margarita Bremer, una de las participantes en el homenaje de Berlín, recordaba un detenido que fue sacado de casa en pijama. Los policías le dijeron que se vistiera y que cogiera un plato y una cuchara para desayunar. Él, pensando que no tardaría en regresar, les dijo que prefería desayunar en su casa. Jamás volvió y fue colocado, con los demás, en la frontera con el ‘bloque soviético’.

El grupo de Fernando Lafuente, que en 1950 tenía 16 años, estuvo vagando sin rumbo, escondiéndose de día y caminando de noche, gracias a que uno de los deportados había estado en un campo de exterminio, entendía algo de alemán y podía interpretar los carteles que encontraban. Como ocurrió con la mayor parte de los deportados en esta zona de Europa Central, al ser localizados por los soviéticos pasaron a ser sospechosos de espionaje. En algunos casos, la situación se aclaró gracias a las explicaciones que suministró a las autoridades de Alemania Oriental el Partido Comunista de Francia; en otros casos, antiguos brigadistas internacionales, que sabían algo de castellano, hicieron de intérpretes.

Elsa Osaba, en su relato particular, explica que su tío José “se suicidó… ¡de un disparo en la espalda!” mientras otro familiar, de nombre Francisco, fue encarcelado durante años cuando todavía no se había recuperado del trauma por haber estado en el tétrico campo de concentración de Mauthausen.

Orden de expulsión de 'urgencia absoluta' contra Elisa Úriz. / badostain.net
Orden de expulsión de ‘urgencia absoluta’ contra Elisa Úriz. / badostain.net

Además, todas las organizaciones y  publicaciones vinculadas al PCE fueron prohibidas, entre ellas la Unión de Mujeres Españolas, en la que militaban las Úriz, y la revista Mujeres Antifascistas, a cuyo consejo de redacción pertenecía Elisa, la menor de las dos hermanas. Mayor escarnio supuso la liquidación de la Amicale des Anciens FFI (Fuerzas Francesas del Interior), es decir la asociación que agrupaba a los antiguos combatientes españoles de la Resistencia, muchos de los cuales habían entregado sus vidas para liberar a Francia del yugo nazi.

Estas dos hermanas, de origen navarro,  pioneras de la renovación pedagógica en España, destacadas militantes en la II República y la Guerra Civil, lograron retrasar su expulsión casi un año hasta que en agosto de 1951. Recibida en abril la correspondiente orden, tuvieron que abandonar Francia y refugiarse en Berlín Oriental ese mes, formando con los demás una peculiar comunidad de un centenar de personas que habían sufrido el exilio por partida doble, primero tras la Guerra Civil y después debido a la ‘Operación Bolero’.

Homenaje a las víctimas

Hoy prácticamente no quedan supervivientes de aquellos hechos, salvo algunos hijos o nietos de aquellos deportados. Concretamente, en el homenaje de Berlín estaban presentes, aparte de Fernando Lafuente y Margarita Bremer, ya citados, la hija y nieta de esta última, Anja y Friederike, Mercedes Álvarez (hija de Ángel Álvarez), Paloma Plaza (hija de Eliseo Plaza), Julio Aristizábal y la doctora Olga García Domínguez, que llegó a Berlín Oriental unos años más tarde.

Sus mayores, como Elisa y Josefa Úriz, fueron enterrados en lugares especialmente habilitados y de forma preferente junto a los brigadistas internacionales de la Guerra de España, al lado de otros destacados luchadores por el socialismo y contra el régimen hitleriano en los dos principales cementerios de la extinta República Democrática de Alemania.

Jamás, desde la Guerra Civil, una representación oficial de España había reconocido ese sufrimiento hasta la inauguración de la exposición sobre las hermanas de origen navarro que permanecerá abierta hasta el 5 de abril y que, probablemente, recorrerá otras ciudades alemanas. Tanto a la inauguración como a la recepción oficial de la Embajada, asistió una delegación del Ayuntamiento del Valle de Egüés y del Concejo de Badostáin, de donde eran originarias, presidida por Alfonso Etxeberría y Xabier Ziritza.

Olga García Domínguez, que conoció personalmente a Elisa Úriz, se encargó de agradecer el histórico gesto hacia los exiliados al embajador, Pablo García-Berdoy, quien lamentó que esta iniciativa no se hubiera realizado antes.

El mismo sentido tuvo la intervención de la directora del Instituto Cervantes, Cristina Conde, que destacó expresamente el reconocimiento a quienes, víctimas de la psicosis de la Guerra Fría, sufrieron el exilio por partida doble. Desde el Instituto Cervantes se planteó incluso la posibilidad de que se pudiera llevar la exposición a París, dando así ocasión a que Francia también borrara este punto negro de su historia contemporánea.

Breve historia del Muro de Berlín.

Fuente: Muyhistoria.es

Autor: Javier Flores.

ras la Segunda Guerra Mundial, en plena guerra fría, se erigió un símbolo de la diferencia entre dos culturas, el Muro de Berlín. Desde el 13 de agosto, cuando se comenzó a construir, hasta el 9 de noviembre de 1989, cuando ocurrió la famosa caída, millones de ciudadanos fueron prisioneros de una cárcel a cielo abierto.

En esos 28 años cientos de personas murieron intentando cruzar a la zona occidental, miles de familias se vieron separadas, hubo cientos de detenidos y miles de guardias fronterizos velaron porque nadie pasara al otro lado.

Su construcción costó unos 16.155.000 marcos de la Alemania Oriental. La frontera, estaba protegida por una valla de tela metálica, cables de alarma, trincheras contra los vehículos rodados, una cerca de alambre de púas, 30 bunkers y más de 300 torres de vigilancia.

La caída del Muro de Berlín fue el primer paso hacia la unificación de las dos alemanias, que tuvo lugar el 3 de octubre de 1990. Posteriormente, el 20 de junio de 1991 Berlín se convertiría oficialmente en la nueva capital de la Alemania unificada.

Actualmente los restos del muro, de la represión y de la Guerra Fría son una de las mayores atracciones turísticas de Alemania.

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Los costes del nazismo alemán para Grecia (y para España)

Izado de la esvástica en la Acrópolis de Atenas en 1941. / SCHEERER (BUNDESARCHIV)

Autor: Vicenç Navarro.

Fuente: Diario El Püblico, 24/03/2015

Para entender la crisis existente en la Unión Europea, ayuda el conocer la que ocurrió en los años treinta en Europa, y como ambas crisis han afectado la relación de Alemania -el centro del sistema económico europeo- con la periferia, centrándonos en este artículo en Grecia, y con algunas notas también de la relación de Alemania con España en ambos periodos históricos.

En Alemania, la primera crisis, generada en parte por la enorme deuda pública acumulada, resultado de las exigencias de los países vencedores de la I Guerra Mundial de que este país pagara las reparaciones por los daños infligidos a los países enemigos durante el conflicto bélico, determinó la elección de un gobierno Nazi liderado por Hitler. La enorme austeridad de gasto público, con los grandes recortes realizados con el objetivo de pagar la deuda, y las reformas del mercado laboral que contribuyeron al crecimiento del desempleo generado por aquellos recortes, causaron un rechazo de la población hacia los partidos que impusieron tales medidas y llevaron a la primera elección de un gobierno Nazi en Europa. Hay que recordar que el nazismo alcanzó el poder en Alemania por la vía democrática debido a su atractivo electoral (y también a la división de las izquierdas, concretamente entre el Partido Socialdemócrata y el Partido Comunista).

El nazismo sacó a Alemania de la crisis económica mediante la militarización de su economía (keynesianismo militar) y al expolio de los países periféricos, incluyendo Grecia. La ocupación de Grecia (1941-1945) fue de las más brutales que hayan existido en Europa. Aquel periodo se caracterizó por un sinfín de atrocidades. Pueblos y ciudades fueron testigos de aquellas brutalidades. Mousiotitsa (153 hombres, mujeres y niños), Kommeno (317 hombres, mujeres y niños, donde incluso 30 niños de menos de un año fueron asesinados y 38 personas fueron quemadas vivas en su casa), Kondomari (60 asesinados), Kardanos (más de 180), Distomo (214 muertos), y así una larga lista. Más de 460 poblaciones fueron destruidas y más de 130.000 civiles fueron asesinados, además de más de 60.000 judíos que representaban la mayoría de la población judía en Grecia. El sacrificio humano fue enorme. Y la represión estaba encaminada a sostener una enorme explotación y latrocinio. En realidad, el III Reich robó el equivalente en moneda alemana de 475 millones de marcos, que significaría en moneda actual 95.000 millones de euros. Ante esta situación, ¿cómo puede pedírsele a las clases populares, que fueron las que sufrieron en mayor medida la represión, que olviden esta etapa de su vida? (ver Conn Hallinan: “Greece: Memory and Debt”, Znet Magazine, 18.03.15, de donde extraigo la mayoría de datos de este artículo).

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Selma, el triunfo pacífico y silencioso de Martin Luther King.

Fotograma de la película ‘Selma’ donde se representa la primera gran marcha de Selma a Montgomery. WANDA
Autora: CLARA FELIS.

Fuente: El Mundo. 04/03/2015.

Resistir. Luchar sin violencia. Protestar de manera silenciosa para hacer más ruido que el que grita. Esperar y vencer. Esos fueron los pasos que siguieron todas y cada una de las personas que se unieron al Movimiento por los derechos civiles de los afroamericanos de Martin Luther King (1929-1968) cuyo legado aún perdura en la actualidad. Conseguir la igualdad social y acabar con la segregación racial fue la principal batalla del pastor, que convirtió en realidad los sueños que desde hacía décadas parecían inalcanzables. I have a dream. Ya saben.

Sobre ese largo camino hacia la libertad, a vivir sin miedo, al respeto mutuo trata Selma. La película de Ava DuVernay, que llegará a las salas de cine este viernes, se remonta y muestra con detalle aquel intenso 1965. El año de las grandes marchas de Selma. El año de la unidad americana. El año en el que los afroamericanos pudieron por fin votar.

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Así escondió Franco en España a Beria, el ‘carnicero’ de Stalin.

Beria, con la hija de Stalin en brazos y el dictador al fondo.

Fuente: El Confidencial, 13/03/2015.

Autor: Germnán Sánchez.

Torcuato Luca de Tena, director de ABC, soñó pasar a la historia con un titular de alcance mundial: Así escondió Franco en España a Beria, el carnicero de Stalin. Víctima de un aventurero internacional de nacionalidad nicaraguense y orígenes malagueños, llamado Fabio Gallo, que le vendió, estando de vacaciones en Torremolinos, la exclusiva de la presencia de Beria en España, Luca de Tena se atrevió a salir, sin pasar por la censura, y sin pruebas, afirmando que Beria estaba en España. Se lo hicieron pagar con su fulminante destitución.

La historia, que relata Juan Benet en su impagable Otoño en Madrid hacia 1950, sucedió hace 62 años y la protagonizaron dos personajes: Domingo Dominguín y Lavrenti Beria, quien controló la policía política de la URSS de Stalin entre 1938 y 1953. Su principal ‘logro’ fue la eliminación del rival del dictador, Trotski, antes de que en 1941 comenzase la invasión nazi de la URSS, y tejer la red de espías atómicos que, cuatro años después de Hiroshima, pondrían la bomba en manos de la Unión Soviética.

La muerte de Stalin en 1953 llevó a la destitución de Beria que, súbitamente retirado de la escena política, se hallaba en un lugar desconocido. Domingo, uno de los dos hermanos  de Luis Miguel Dominguín, fue torero, empresario y miembro del Partido Comunista de España. Los Dominguín eran cosa aparte. Su hermano Luis Miguel tenía acceso, a la vez, a un exiliado, caracterizado comunista, Pablo Picasso, y a Francisco Franco. Joaquín Jordá, amigo de Domingo Dominguín, contaba que en una cacería Franco le preguntó: “Dígame, Dominguín, ¿quién es el comunista de los tres?«. Y Luis Miguel contestó: «Los tres, mi general, los tres”.

Alemania, destrucción o revancha: las cuentas invisibles de la II Guerra Mundial.

Conferencia de Potsdam, Alemania (1945)
Conferencia de Potsdam, Alemania (1945)
Autora: LIDIA GÓMEZ

Fuente: Diario El Mundo, 23/02/2015

Cuba-Estados Unidos: el último capítulo de la guerra fría.

Sorpresa en la Calle Ocho de Miami tras el anuncio de diálogo con Cuba

Fuente: El Diario.es
Autor: Pascual Serrano, 17/12/2014.

Conversaciones secretas al más alto nivel, intercambio de agentes, mediación del Vaticano, preparación del ambiente mediante editoriales en los diarios más influyentes, comparecencias simultáneas (que no conjuntas) de los jefes de Estado enfrentados difundidas en directo… Ayer asistimos a uno de los últimos capítulos de la guerra fría, una parte de la historia que a los jóvenes europeos les resulta absolutamente ajena pero que en Cuba se vivía todos los días.

El acuerdo, además del tremendo impacto humanitario y político de la liberación de presos en ambos países, supone el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, si bien, en palabras de Raúl Castro, «esto no quiere decir que lo principal se haya resuelto. El bloqueo económico, comercial y financiero que provoca enormes daños humanos y económicos a nuestro país debe cesar».

El fascismo que sobrevivió a Hitler.

El general Franco y Adolfo Hitler durante su entrevista en Hendaya, en 1940

Fuente: El País, 1 de febrero, 2015.

Cuando acabó la Guerra Civil española, más de la mitad de los 28 estados europeos estaban dominados por dictaduras con poderes absolutos, que no dependían de mandatos constitucionales ni de elecciones democráticas. Excepto en el caso de la Unión Soviética de Stalin, todas esas dictaduras procedían del firmamento político de la ultraderecha y tenían como uno de sus principales objetivos la destrucción del comunismo.

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Y Winston se convirtió en Churchill.

Churchill encarnó un tipo de conservadurismo paternalista.

Fuente: Diario «El Mundo«, 26/01/2015

Autor: ROBERTO VILLA, Departamento de Ciencias Sociales, Universidad Rey Juan Carlos

En el ocaso vital de su progenitor, un emocionado Randolph Churchill resumió su trayectoria de la siguiente forma: «Tu gloria está consagrada para siempre en el pedestal inmortal de tus logros; y jamás podrá ser destruida o manchada. Fluirá con los siglos».

Estas palabras quedarían como una simple demostración de amor filial si no fuera porque iban dirigidas al que, hoy por hoy, se considera el político británico más importante del siglo XX. Más aún, Winston Churchill es una de las figuras sin las que es imposible comprender la historia de la Europa de entreguerras y del mundo de la segunda postguerra.

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